La ansiedad: Una oportunidad para crecer como persona

La ansiedad: Una oportunidad para crecer como persona

A la hora de enfrentarse a cualquier problema de salud es fundamental que un profesional adecuado nos proporcione información para poder tratarlo, en el caso de la ansiedad también es imprescindible. Entender qué es la ansiedad y cómo funciona, es dar el primer paso para reducirla. Nuestro propósito en este artículo, es hacer que entiendas cómo  funciona la ansiedad.

La ansiedad es el efecto  en el cuerpo de una descarga de adrenalina de nuestro cerebro, y es uno de los síntomas más comunes en la población de todo el mundo. Se trata de una reacción normal del ser humano, y es adaptativa, ya que nos permite reaccionar  ante un peligro real y actuar. Sin embargo, cuando la descarga de adrenalina se produce ante situaciones que no son realmente amenazantes para la vida de la persona, entramos en un bucle de miedo a sentir los efectos de esa adrenalina en nuestro cuerpo. En estos casos,   dicha adrenalina produce los característicos síntomas de la ansiedad (palpitaciones, falta de aire, hormigueo, sensación de mareo, sudor, temblor, escalofríos, etc.). En las situaciones en las que surge la ansiedad sin existir un peligro real, nuestro cerebro está alertándonos de que tenemos alguna forma de funcionar en nuestro día a día, que no nos sirve, por ejemplo si somos muy autoexigentes y autocríticos con nosotros mismos, lo más probable es que a la larga, nuestro cerebro proteste haciendo ansiedad.

La ansiedad, por lo tanto, es el equivalente a una fiebre cuando tenemos una infección, o una inflación en el pie si nos hemos torcido un tobillo. La ansiedad es el síntoma que nuestro sistema inmunológico mental hace para avisarnos de que hay un mecanismo de funcionamiento psicológico que no es sano para nosotros.

Los síntomas que genera la ansiedad son desagradables, por esta razón las personas que la sufren, la consideran una amenaza, valoran la ansiedad como algo que les puede hacer daño. De esta manera se inicia y se retroalimenta un círculo vicioso que genera y cronifica la ansiedad: Aparecen las sensaciones debidas a la ansiedad –> Se hace una interpretación negativa de esas sensaciones –> Se produce una reacción de alarma (miedo, preocupación…) –> Se vuelven a aumentar las sensaciones al aumentar la ansiedad.

La reacción que tienen la mayoría de las personas que sufren ansiedad, es intentar que se les pase, escapar de esas sensaciones desagradables, para ello suelen poner en marcha conductas evitativas (irse del sitio en el que está el estímulo ansiógeno, no acudir a sitios donde saben que pueden experimentar ansiedad, no realizar ciertas actividades, automedicarse, consumo de sustancias…). Las conductas evitativas funcionan reforzando la creencia de que ese estímulo ansiógeno es realmente peligroso, ya que la señal que se le envía al cerebro es: “si me aparto de ese estímulo me encuentro mejor, por lo que interpreto que es amenazante”. Así, cada vez toleramos menos esta tensión y se entra en un ciclo, o incluso un estilo de vida basado en la evitación de la ansiedad, lo cual nos hace todavía más vulnerables a ella.

 

Hay muchos tipos de manifestaciones de la ansiedad:

  • Trastorno de pánico
  • Agorafobia
  • Fobia social
  • Fobias específicas (animales, alturas, sangre…)
  • Trastorno Obsesivo Compulsivo
  • Trastorno de Ansiedad Generalizada
  • Trastorno de estrés postraumático
  • Somatizaciones

 

En Giráldez Psicólogos contamos con un equipo especializado en el tratamiento de los diferentes tipos de manifestaciones de la ansiedad, siempre adaptándonos a cada persona, a sus necesidades y a sus experiencias.

La ansiedad no es un enemigo, es muy importante saber y tener presente que la ansiedad no mata, sino todo lo contrario, es un indicador que el cerebro nos proporciona para hacernos saber que tenemos la necesidad de revisar nuestros patrones de comportamiento, nuestro sistema de creencias, y en definitiva nuestra forma de funcionar. Se trata de una oportunidad para crecer y mejorar tu calidad de vida.

 

“Nunca es tarde para emprender un camino nuevo, nunca es tarde para aprender a auto-gestionarte”